CRIMINON

Tres décadas de crecimiento de la población carcelaria de Estados Unidos ha llevado a la nación a un umbral preocupante: uno de cada 100 adultos en los Estados Unidos está ahora confinado tras las rejas. La población carcelaria total es actualmente de 2,3 millones, el número más alto del mundo; seguido por China, una nación mucho más poblada, con 1,5 millones. El coste de mantener el sistema penitenciario en EE.UU. superó los 49 mil millones dólares en 2007, muy por encima de los 12 mil millones de dólares que costaba en 1987. Las cifras hablan por sí solas. Y teniendo en cuenta que la tasa de reincidencia es del 80 por cien, existe una urgente necesidad de una tecnología viable que ofrezca verdadera y duradera rehabilitación de los delincuentes para que puedan convertirse en miembros productivos de la sociedad.